Friday, March 14, 2008

Metete el diario ya sabes donde...

En algún post anterior comentamos acerca del rechazo que nos generaban aquellos pasajeros del Subte, Línea D, que corren desesperados tras el diario La Razón.

Bien, existe otro grupo de personas que nos provoca lo mismo, es un poco más reducido por suerte, pero también tiene en común, con el anteriomente citado, la cuestión del diario.

Estamos hablando de aquellos que ingresan a tomar un café (mayormente se da con los que eligen esta opción) o un combo en un local de comidas rápidas y desesperadamente buscan "el diario gratis que te damos en este local para que te informes mientras consumís algo".

Pueden ser personas mayores (que en su caso quizás sea más entendible, digo, se toman un café y aprovechan y leen el diario, sabiendo que no cuentan con ingresos suficientes como para gastar en ambas cosas) pero también las hay jóvenes o de mediana edad, que buscan el diario pertinente. Primero lo hacen (lo de buscar) en el lugar donde suelen estar (una especie de biblioteca-gaveta-cajoncito situado cerca de la zona reservada para el McCafé) y si allí no lo encuentran le preguntan a algún empleado del local, y si aún no han dado con él y ven que algún cliente lo tiene entre sus manos, se acercan al sujeto en cuestión y se lo piden amablemente.

"Disculpame, lo estás leyendo?" "Terminaste"? "Me puedo llevar x sección?".

En fin...para colmo de males, cuando no tienen a su disposición un ejemplar, desde luego se quejan, exclaman, no muy deliberadamente, pero lo hacen.

Otra cosa que pasa en los locales de Comida Rápida es que a la gente le cuesta o bien no le gusta "compartir" la mesa con un desconocido. Lo pongo más claro.

En este tipo de lugares, por lo general, tenemos por un lado las mesas simples, con sus dos sillas, para que sean ocupadas por dos personas, y por otro, las mesas dobles, con cuatro sillas, para que, en teoría, sean ocupadas por cuatro personas, conocidas o no.

Las parejas ocupan la mesa simple. Bien. Les corresponde.
Los solos también se sientan allí, salvo algún que otro descocado que prefiera la doble.

No hay problema alguno allí.

Pero a veces, las simples están ocupadas, y otro ser humano (u otra pareja) ingresa en solitario (o en pareja) al lugar y no encuentra una libre (que es su primera elección), y le da "cosa" sentarse en una mesa doble que está ocupada sólo en una mitad (sea por una pareja o por otro que esté solo). Como primera medida, revisan bien el lugar, lo relojean, para chequear si efectivamente no hay una mesa completamente libre, incluso pueden esperar un poco a ver si alguna se desocupa .

Cuando ya no tienen más alternativa, se acercan a alguna de las mesas dobles ocupadas en una mitad, y preguntan:

"Te molesta si me siento al lado, en la mitad de la mesa doble que está sin ocupar".
"No, por favor, adelante".

Lo llamativo es eso... como última alternativa piensan en eso de ir y preguntar, cuando debería ser algo normal...* si en la mesa doble una parte está vacía, sin ocupar, qué permiso tendría que pedir (digo, más allá del gesto de buena educación o respeto, supónganse que le lleva a uno a preguntar o hacer un gesto para indicarle al otro que se va a sentar allí). Qué permiso o qué problema hay? Porque, insisto, dudan antes de hacerlo, esperan a ver si otro territorio queda liberado y sino tienen más remedio, proceden de esta manera. Prefieren una mesa en soledad para ellos y quedarse esperando un rato, antes de pensar la otra posibilidad. A mi me llama la atención eso. No sé.

Quizás nadie más lo haya notado y sea un sensación mía, pero como he visto que se repite casi a diario, lo hago público.

* llamativo es que les cueste o no les guste compartir esa mesa doble con un descnocido en realidad, no que pregunten.

Saludos.
SirThomas.

4 comments:

Pat- said...

Interesante, Tomas. Lo he visto mucho eso, lo del diario y lo de los asientos. Por mi parte, nunca agarro el La Nacion del Mc Donald's porque 1-me da asco :P que esté manseado, y mientras tocás el diario, te comés la papafrita. 2-Siemopre alguien tiene las secciones mas jugosas y yo me tengo que quedar con el Economico, o Empresas o Deportes :s
3- Es incómodo el diario La Nacion.

Lo de compartir la mesa de al lado, supongo que es por la cercanía. Mucha gente quiere comer sola, y no puede sentarse en mesa de una unidad (?) porque no hay.
En el colectivo pasa parecido, la gente es reacia a sentarse en asiento doble.

Saludos :D

SirThomas said...

Sí, La Nación es un diario incómodo para leer.

Lo del bondi quizás se note menos porque sí o sí se tienen que sentar, pero pasa también.

Saludos *Pat* gracias por pasarte.

Nacho said...

Creo que se intenta evitar las mesas compartidas por miedo a andar invadiendo la privacidad ajena. Me da la sensación.

SirThomas said...

Es probable sí. Mucha privacidad de todas maneras no se puede tener en ese tipo de mesas, pero es una posibilidad sí.

Yo me lo explicaba (o le encontraba su respuesta) más por el lado de la individualidad.

Saludos Nacho